El dirigente del Frente de Izquierda y dirigente gremial de la Unión Ferroviaria cargó contra la CGT “siempre fue oficialista, gobierne quien gobierne, con tal de mantener su poder”.
En el marco del aumento en el boleto del pasaje del tren, el dirigente gremial de la Unión Ferroviaria y dirigente de la Izquierda, Rubén “Pollo” Sobrero, se refirió al estado del sistema ferroviario, a lo que indicó que “el problema es que este gobierno ha aumentado la desinversión”, ya que “en los últimos ocho meses no entró un solo repuesto”. “Eso nos llevó a una crisis muy profunda, donde te roban un cable de señales y no tenés cómo reponerlo”, lamentó.
“Todos los gobiernos que han pasado han colaborado en la destrucción del sistema ferroviario en mayor o menor medida. No es algo nuevo de hoy, pero estamos en una crisis muy profunda. Se asemeja mucho a lo que pasó en el 2001. Ocho meses sin poner un solo peso no es gratis. La no inversión se traduce en falta de seguridad para el usuario. Ya vivimos lo que es la falta de inversiones con la masacre de Once, con 52 muertos”, recordó el representante de UF en contacto radial con Política del Sur.
“El transporte tiene que abaratar los costos tanto de los viajes para los trabajadores como los costos operativos de los fletes. Hoy, traer una tonelada de soja del NOA a Buenos Aires sale más caro que llevarla de Buenos Aires a China. Algo está mal ahí. Con las ganancias que se obtendrían de la carga si fuera una empresa estatal, podríamos hacer que la gente viaje gratis en los trenes, autofinanciando el sistema. Ahí hay que tomar decisiones políticas. Las cuatro empresas de carga que son las que dejan ganancias son empresas multinacionales que utilizan el tren como flete propio, ¿estamos dispuestos a decirle a estos empresarios se acabó la primavera? Este gobierno va para el otro lado, para el de la destrucción de todo lo que tiene que ver con el país”, aseveró.
En esa línea remarcó que “nunca se va a recuperar ninguna empresa del Estado si no es dirigida por los laburantes”. “Cada cuatro años cambia la gestión y ponen a trabajar a sus militantes, nadie continúa lo que inició su antecesor. Se necesita un directorio obrero, con los mejores laburantes de la empresa, y con una orientación clara de hacia dónde avanzar y qué inversiones realizar. Hoy las empresas públicas no son más que un botín de guerra. Cuando gobiernan los nacionales y populares, meten gente; cuando gobiernan los liberales, entregan las empresas a los amigos que les financiaron la campaña”, afirmó.
En otro orden de temas, señaló que es necesario que “la CGT esté al servicio de la lucha”. “No podemos permanecer indiferentes cuando vemos imágenes de policías pegándole a personas de 80 años o tirándoles gas pimienta en la cara. No ejercemos la violencia, la ejercen los gobiernos que quieren ajustar, como el de Milei, que quiere destruir la patria”, recalcó.
Sobrero reclamó que la central obrera “hace medidas para descomprimir, pero no da coherencia a un plan de lucha”. “La CGT siempre fue oficialista, gobierne quien gobierne, con tal de mantener su poder económico y político, se abrazan con cualquiera”. “Hay funcionarios de la CGT que te dicen que están para garantizar la gobernabilidad, pero está para representar los intereses de los laburantes de conjunto. De la gobernabilidad se encarga el gobierno y todos los socios que tiene”, expresó.
“La burocracia sindical peronista es un gran problema que tenemos los laburantes. No nos permite enfrentar al gobierno de forma organizada, porque ellos forman parte de nuestros enemigos”, cerró. FUENTE: politicadelsur.com